Las 20 cercetas pardillas que han estado algo más de una semana en un jaulón de aclimatación ya han sido liberadas en la Zona de Especial Protección de Aves (ZEPA) de las lagunas de Las Moreras, en Mazarrón. Esta suelta tiene lugar en el marco del proyecto LIFE en el que participa la Comunidad, a través de la Dirección General de Medio Natural, como socia beneficiaria.
"Los animales han permanecido en el jaulón solo lo necesario para su aclimatación al lugar, ya que se trata de especies procedentes del programa de cría en cautividad que se lleva a cabo en el Centro de Recuperación de Fauna La Granja de El Saler de Valencia y el Centro de recuperación de Fauna de Santa Faz de Alicante", matizó el titular de Medio Ambiente, Mar Menor, Universidades e Investigación, Juan María Vázquez.
Durante los días de permanencia en el jaulón, los agentes medioambientales de Mazarrón y miembros de la Asociación de Naturalistas del Sureste (ANSE) han vigilado a las especies y las han alimentado. Asimismo, han instalado cámaras de fototrampeo para el seguimiento y dos cajas nido con el objetivo de intentar favorecer la formación de parejas y nidificación en esta primavera.
La ZEPA las lagunas de Las Moreras, ubicada en el municipio de Mazarrón, es además un humedal de importancia internacional incluido en la lista Ramsar. Se localiza estratégicamente entre los humedales de Alicante y Andalucía, también objetivos del proyecto LIFE, con la ventaja añadida de que en la Región de Murcia no está permitida la caza de anátidas.
La liberación ha sido posible gracias a las actuaciones llevadas a cabo en este humedal con el objetivo de mejorar el hábitat para la especie. En concreto, se han retirado 95 toneladas de escombro, se han revegetado 550 m2 con plantas autóctonas y se ha arreglado la antigua valla en una longitud de 150 m con el fin de regular el acceso a las lagunas, todo ello en la zona Noreste de la antigua gravera. Las actuaciones también incluyen el acondicionamiento de un tramo de orilla mediante el desbroce de 1.500 m2 del carrizal para favorecer la heterogeneidad de hábitats para la especie.
La cerceta pardilla es la especie de pato más amenazada de Europa, y en España, con apenas 100 parejas, fue declarada en 2018 en peligro crítico de extinción.
El proyecto LIFE Cerceta Pardilla tiene el objetivo de mejorar el estado de conservación de 3.000 hectáreas de humedales para revertir el riesgo de extinción del pato más amenazado de Europa, en situación crítica en España. Por ello, se han emprendido un conjunto de acciones para reforzar el estado de sus poblaciones en el medio natural, mejorar el estado de los humedales y el conocimiento científico de la especie.