A falta de la reposición de la señalización horizontal y vertical, la Cuesta del Faro ‘Manuel Acosta’ ha quedado completamente renovada a la altura de los edificios Altius y Finis. En este lugar, se produjo el desprendimiento de buena parte de la calzada llegando a afectar a varias viviendas y al normal tránsito por la única vía que da acceso al Cabezo del Faro.
El teniente alcalde y concejal de Infraestructuras, Ginés Campillo, ha aprovechado el final de los trabajos para visitar la zona. El edil ha descrito las obras de una “complejidad técnica” debido a factores como la acusada pendiente, la proximidad de la calle a los edificios, la amenaza del talud, la existencia de viviendas habitadas bajo rasante o la necesidad de mantener el tráfico rodado.
Como solución al problema que los movimientos de tierra ocasionaron, se ha ejecutado la construcción de un gran muro de hormigón armado que alcanza en algunos puntos los siete metros de altura. Además, entre las actuaciones visibles, se ha mejorado la seguridad en el tránsito de viandantes y vehículos con el ensanche de la calzada y la construcción de aceras a ambos lados.