Juan Soler, Alcalde pedáneo de Leiva, ha tomado posesión de su bastón de mando con la gran ilusión de trabajar por su pedanía y por Mazarrón. En sus primeras semanas desempeñando este cargo ya ha sido consciente de "la responsabilidad que este puesto supone para que las cosas salgan lo mejor posible". Soler ha sido agente de la Guardia Civil y sabe, mejor que nadie, lo que significa representar una autoridad. Más si cabe, si tenemos en cuenta que la mayor parte de sus años ejerció en la Benemérita como jefe de patrulla y comandante de puesto.
P: ¿Están siendo sus vecinos muy exigentes en estos primeros días?
J.S: No, porque acabamos de empezar a trabajar; pero sí que esperan de mí muchas cosas.
P: ¿Y tú que esperas conseguir?
J.S.: Pues poder solucionar algunos problemas históricos como la mejora y arreglo de los caminos o que no se tenga que cortar el tráfico en el puente de la rambla de Las Moreras cada vez que llueve.
P: Imagino que los caminos rurales son muy importantes para la pedanía, ¿no?
J.S.: Son parte de la vida de Leiva, de su día a día, por eso hay acometer una mejora de los mismos de manera efectiva.
P: ¿Y cómo está siendo ahora la vida en la pedanía después de los cambios en el consistorio?
J.S.: Pues la gente está muy satisfecha porque ve que los nuevos representantes del municipio tienen ganas de conseguir grandes cosas para todas las zonas, algo que agradecemos en los núcleos rurales. Incluso los que al principio se mostraban un poco reticentes, ahora están contentos con el cambio.
P: ¿Qué dicen estos últimos vecinos que han cambiado de opinión?
J.S.: Que ahora ven un gran sentido de la responsabilidad en general, algo que es muy importante, y un Alcalde en particular, Ginés Campillo, al que se le ve verdaderamente comprometido con su tierra.
P: Creo que el compromiso es también de carácter general, ¿no crees?
J.S: Sí, tanto de nuestra parte como por parte de los vecinos. Por ejemplo, a mis vecinos lo que les ha extrañado es que, casi sin dinero, hayamos hecho este año las fiestas. El Ayuntamiento no ha podido aportar dinero y no sólo hemos sacado adelante los festejos, sino que además hemos hecho unas buenas fiestas.
P: Habéis exprimido el último euro hasta el máximo…
J.S.: Incluso ha sobrado dinero gracias a la imaginación y al esfuerzo que hemos puesto para conseguir y gestionar lo mejor posible los recursos que estaban a nuestro alcance. No en balde estoy acostumbrado a velar por la pólvora del rey, que es escasa y preciosa.
P: ¿Y ahora en qué proyecto trabajas?
J.S.: Pues antes de nada quiero decir que hay que hacer las cosas con sentido común, para no tomar decisiones en contra de la gente o en beneficio de unos pocos. En este sentido, hay que acometer problemas básicos como el de algunas viviendas a las que el fluido eléctrico llega débil.
P: Mazarrón tiene muchas carencias, ¿verdad?
J.S.: Sí y hay que acometerlas con esfuerzo. Yo voy a luchar por conseguir un transporte público, actualizar los planos con los nuevos núcleos poblacionales o la correcta señalización de los caminos
P: Pero hay algunas cosas que habrá que pedírselas a la Comunidad Autónoma…
J.S.: Sí. En principio hay que pedirles solución a lo que ocurre con la precaria situación en la que se encuentre el puente o badén que existe en la rambla de Las Moreras y por donde pasa la carretera D-4 (Mazarrón-Morata) y que como bien sabes, es por la que se accede a Leiva, La Atalaya, La Majada, etc.
P: Se ha convertido en un punto negro de nuestro municipio indiscutiblemente
J.S.: Cuando se construyó la Autopista Cartagena-Vera, fuimos muchos los que pensamos que, como consecuencia de la construcción de la citada autopista, se construiría un nuevo puente en la D-4, pues el que hay se desborda cada vez que llueve con cierta intensidad y para prevenir males mayores, hay que cerrarlo al tránsito. Pues bien, cuando se construyó la autopista, lo que ocurrió es que antes de acceder al puente, había una pendiente de un 8% y con posterioridad, o sea en la actualidad, la pendiente aproximada supera el 12%, y ahora es muy peligroso circular por ahí.
P: Pero no sólo se trata del desnivel…
J.S: No, también hay que decir que la carretera carece de pilotes que señalen los puntos kilométricos. Los cuales desaparecieron hace más de 12 años.
P:¿Y cómo ves personalmente al nuevo equipo de gobierno y al nuevo Alcalde?
J.S.: En Ginés yo confío plenamente y la gente también está confiando porque es como meter un buen futbolista en un equipo, hace buenos a los demás. Antes de conocer a Ginés no confiaba en los políticos, ahora sí creo que un político puede ser, a la vez, una persona muy honesta. Sobre el resto los conocía poco, pero también confío en ellos porque todos miran hacia la misma meta: mejorar Mazarrón.
P: ¿Qué es lo que nunca se debe perder de vista?
J.S.: Lo importante es tener sensibilidad y comportarse con lo ajeno como se comportaría uno con lo propio. Así pocas veces se fracasa y lo que se ha hecho y se está haciendo es lo correcto. La democracia ha apartado a los que no lo han hecho bien para dejar paso a otros que tenemos ganas de trabajar y muchas ilusiones por mejorar nuestro municipio.
